En eBay puede encontrarse casi de todo, hasta una «casa encantada». Josh Bond, un artista norteamericano, ha puesto a la venta en la popular web una genuina casa plagada de presencias extrañas -al menos eso es lo que él asegura- en la localidad de Cuchillo, en Nuevo México. El propietario partió de un precio de 10.000 dólares, pero desde entonces la cifra ya se ha duplicado en la subasta.
Con una población de 35 almas, Cuchillo es casi por sí mismo un pueblo fantasma. La casa en venta fue construida alrededor de 1830 y tiene tres habitaciones y un cuarto de baño, muros de adobe y suelos firmes de madera. En su día, el pueblo contó con una cantina, almacén, oficina de correos y casa de huéspedes, pero el paso del tiempo y un incendio en el año 2000 acabaron con todo eso. Bond adquirió el edificio ahora a subasta hace algunos años y lo reformó. Sin embargo, parece que no pudo desacerse de algunos huéspedes especiales que, según la tradición, son los espíritus de los viajeros que en vida pasaron por allí.
Según Bond, tres grupos de cazadores de espíritus aficionados (los cazadores, no los espíritus, a los que vamos a atribuir algo más de experiencia y profesionalidad) visitaron el edificio y se llevaron unas cuantas sorpresas. Por lo visto, los «ghost-hunter» fueron testigos de fenómenos sobrenaturales y concluyeron, por supuesto, que la zona estaba encantada.
Un pequeño chirrido
omo en estos asuntos tan interesantes siempre tiene que presentarse un aguafiestas, Benjamin Radford, editor de la revista Skeptical Inquirer y colaborador de LiveScience, decidió el pasado mes de julio pasar una noche en la casa al estilo de Juan sin Miedo. Y como es habitual en cuanto una mente racional entra en escena, los fantasmas hacen mutis por el foro. Qué decepción.
Radford pasó largas horas esperando una psicofonía, un halo blanco, un escalofrío en la nuca, que los platos salieran disparados de sus estantes y los armarios se abrieran solos... un saludo del más allá como Dios manda. Pero nada. Sólo un pequeño chirrido... el ruido de una puerta empujada por el viento.
Aún así, la venta de la casa puede ayudar a reanimar la zona y recuperar un edificio histórico. Si tiene interés por la vivienda y no le importa tener compañía que ulule o se le cruce volando por el pasillo cuando menos se lo espera, dese prisa, ya que la puja (el número es 180414565873) termina, como no podía ser de otra forma, el día de Halloween (31 de octubre)
(FUENTE: abc.es)
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